¡Algún día lo lograré! -- Parte II

-¿Diga? - contestaron al otro lado del teléfono.

-¡Hola, Pablo! Soy Sara.

-¡Hola, Sara! ¿Qué tal?

-Bien. Estudiando... como siempre. ¡Oye! ¿Tú sabes algo de Verónica?... Es que quedó de pasarme unos apuntes de matemáticas hoy y no sé nada de ella. Al móvil ni siquiera me coge...

-No sé... Yo casi te iba a preguntar lo mismo. A mí me da que algo le pasó ayer en la fiesta esa a la que iba... porque quedó de llamarme luego y yo tampoco sé nada de ella. Es más... en el Messenger tampoco aparece y siempre está conectada si está en su casa.

-Yo es que estoy castigada y tengo un examen mañana... si no iba hasta allí...

-Pues tendré que ir yo entonces... Luego te cuento ¿Ok?

-¡Vale! ...Pero acuérdate de llamarme de verdad... ¡que te conozco!

-¡Que siiiiiiiiii!

-Entonces... ¡Hasta luego!

-¡Ciao, "pequeñina"!

***********

-¡Toma tu guitarrita y vámonos, Mike! Me jode llegar tarde y aún tenemos que pasar por mi casa...

-¡Qué prisas!... ¿Tanto odias mi guitarra que te quieres largar?

-No la sé tocar y tú te empeñas en que aprenda... Si no tienes guitarrista lo que tienes que hacer es buscarte uno y no liarme a mí... Sabes que no valgo para esto...

-Solo era para hacer una prueba... y no tengo guitarrista ni batería... yo toco cualquier cosa, pero la batería se me resiste... tengo que acabar de componer la música para la canción nueva y no me queda otra que hacerlo yo también... pero necesito que alguien me toque la guitarra mientras...

-...Y como no está Jorge, me toca ser el tonto a mí.

-¡Pues sí!... Jorge y Raúl están en un examen hasta las 8 y solo no me concentro...

-Ya sabes que para pedirme opinión, ayudarte con las letras, corregirte las faltas de ortografía o cosas así, te ayudo... pero nada que se parezca a tocar, o subirme a ningún escenario, me apasionan ni lo más mínimo.

-¡Vale, Víctor! ...¡Tú y tu miedo escénico me tenéis frito!... No lo haces tan mal tampoco...

-Vamos a llegar tarde, tío. ¡Recoge de una vez y vámonos!

-No es tan tarde... No sé por qué tienes tanta prisa por llegar a tu casa...

-Pues... Porque quiero saber si mi madre va a estar al final en casa o no...

-Pero... ¿no decías que sí que se iba?

-Sí, pero no sé si voy a tener que quedarme a cuidar a mis hermanos o no...

-Siempre se queda "La Coletas" con ellos ¿no?... ¿Qué problema le ves?

-No sé si va a tener humor de cuidarlos después de lo de ayer... Mis hermanos son demasiado para cualquiera... no creo que tenga ganas de pelearse con estes dos.

-¡Aaahh!... Ahí tienes razón... Para que luego digan que yo soy un cabrón con las tías... Lo del Esteban éste es muy fuerte... ¿qué cojones pasaría entre ellos de verdad?

-No lo sé... pero tú viste lo mismo que yo...

-Por eso... tuvo que haberle hecho algo más... Si a ésta la vacilan de mil formas y ni se inmuta...

-Nadie creía que se apareciera por la fiesta... Yo sabía que iba porque le oí algo a mi madre...

-¡Y cómo apareció!... Que no parecía ni ella... ¡Qué cambio, tío!

-Sí... como en "el patito feo"... más o menos.

-Jajajaja... aún me acuerdo de las caras de "las pedorras". ¡Alguna estaba "algo" preocupada por la competencia!...

-Sí... sobre todo la "reina pedorra"... ¡Qué tía! Todo lo que tiene de "tía buena" lo tiene de idiota...

-...Pero tiene unas piernas... ¡ufff!

-Jajajaja...Eso es porque no viste las de mi vecina de cerca...

-¿¡El qué?!

-Me parece que ayer no te fijaste en todo... Estás perdiendo facultades, Mike... jajajaja.

-Jajajaja... Puede ser... O eso o qué tú te fijaste de más... ¿No eras tú el que no quería saber nada de tías en una temporada?

-Y no quiero... pero no puedo negar lo que veo... Estaba yo sentado ayer pensando y mirando al suelo y veo pasar unas piernas... miro hacia arriba y... ¡Sorpresa!

-Ya... que de repente es tu vecina... la de toda la vida... Jajajajaja.

-Sí... más o menos.

¡Algún día lo lograré! -- Parte I

“[…]

¡Algún día lo lograré, Christine!... Te lo prometí y lo cumpliré.

Te quiere y te echa de menos,

V. G. H.”

Esto era lo que me repetía mientras miraba el último rayo de sol por la ventana de mi habitación: "Algún día lo lograré...".

Mientras intentaba quitarme aquel estúpido pintalabios, las lágrimas caían sin tregua llenas de máscara de pestañas por mis mejillas, dejando así un feo surco en mi cara que no hacía más que enfurecerme todavía más.

Había puesto mis ilusiones en aquella tarde-noche y me las habían devuelto hechas trizas... y no dejaba de preguntarme que había hecho para ganarme todo aquello... y la respuesta siempre era: "Nada".

Miré aquel vestido estampado con flores reflejado en el espejo que había sido comprado para la ocasión y no me reconocí... Desde luego esa no era la chica de aquella mañana... Aunque la diferencia más notable era el dolor que reflejaba su cara a medio desmaquillar. La chica de esa mañana, aunque incómoda por la adquisición de aquella ropa no habitual en su armario, tenía una leve sonrisa tímida asomando en su cara.

Me quité una a una todas las horquillas del pelo y me decidí, todavía entre sollozos, a quitarme ese vestido que tanto había dudado en ponerme. Tal vez si lo hubiese sabido no hubiese aceptado el plan y me habría ahorrado el mal trago...

Tenía ganas de gritar, chillar, soltarle a alguien toda mi rabia en la cara... Pero estaba sola en casa y lo único que podía hacer era intentar meterme en cama y dormir... aunque tan solo fueran las 8 de la tarde.

***********

-Esta noche voy a salir, -me dijo mi madre al verme entrar en la cocina- ¿tú vas a salir también o llamo a Verónica para que se quede con tus hermanos?

-Creo que al final salgo... aunque creo que poco rato.- le contesté pensando que tal vez Verónica no estaría de humor para cuidar a los "enanos" después del espectáculo del baile de fin de curso- Pero, si ella no puede venir, me lo dices y me quedo.

-Bueno... entonces se lo digo cuando baje a casa de Eva.

Creo que fue entonces cuando empecé a desvariar pensando en el viernes por la tarde... Y es que, aunque a todos los que estábamos allí nos faltaba bastante información, lo que sí estaba claro es que Esteban se había pasado bastante con Verónica. Para hacerla reaccionar así, a la chica tímida y siempre distante, a la denominada "bicho raro" del curso, la que nunca decía nada de nada ni de nadie, tenía que haberle hecho algo más de lo que se veía a primera vista... que sin embargo ya habría bastado para remover a cualquiera…

Tantos años de vivir uno encima del otro y resulta que ahora me daba cuenta que realmente no sabía nada de ella. Sabía que su madre y la mía eran "uña y carne", que su padre vivía en Londres desde hace muchos años, y que estudió en un internado de allí hasta los 14 años... Había oído alguna vez a su madre y a la mía contar alguna de las razones por las que había vuelto para estudiar aquí, aunque nunca me interesaron demasiado. Y aunque llevaba 2 años en la misma clase que yo y había pasado gran parte de los veranos aquí, hasta hace un par de semanas no habíamos cruzado más de 2 frases seguidas...

Fue precisamente hace esas 2 semanas. También había sido la última vez que hizo de canguro de los mellizos cuando, al venirme de mi salida frustrada con los amigos, la ví en mi salón sentada mientras no llegaba mi madre. Generalmente volvía un par de horas más tarde pero ese día todo me salió peor de lo que pensaba y me rendí antes de tiempo.

No estaba viendo la tele, sino jugando con un videojuego... Mis hermanos hacía rato que estaban dormidos y ella pasaba el tiempo hasta que llegara el relevo jugando. No era mi consola porque yo no tenía el último modelo... así que tuve que suponer que la había traído ella... Y además estaba jugando a un juego de lucha al que no era muy habitual que jugasen la chicas (o al menos las que yo conocía).

Cuando crucé la puerta del salón y la vi, ella paró el juego y se volvió. Vi en su cara que a quien esperaba ver era a mi madre y que estaba tan sorprendida por verme como yo de encontrármela jugando.

-¡Hola! -dije en voz baja- Aún no llegó mi madre ¿no?

-No, y hasta dentro de una hora más o menos no creo que llegue. Tus hermanos ya están en cama.

-Bueno... eso me pasa por rajarme tan pronto... que llego a casa antes que mi madre - le sonreí.

A ella le pareció gracioso el chiste y me devolvió la sonrisa.

-Y mis hermanos... ¿cómo conseguiste que se durmieran tan pronto sin protestar? - pregunté.

-Siempre protestan... no te creas que es tan sencillo.

-Pero consigues que, sin que mi madre esté en casa, se metan en cama antes de las 11... Algún día me tienes que contar como lo haces porque a mí no me hacen ni caso.

-Sí... Algún día...

Me desprendí del abrigo y volví con las zapatillas puestas y un vaso de zumo de la cocina. Me senté en el otro sofá, bebí algo del zumo y lo dejé sobre la mesita.

-No tengo nada de sueño. Supongo que esperaré por mi madre... - dije mientras ella tecleaba el mando y se "cargaba" a unos cuantos enemigos. - Si se hace tarde, puedes irte. Yo te relevo... que, total, lo más difícil es que se duerman, y eso ya lo conseguiste.

-No importa. Yo tampoco puedo dormir así que no me importa esperarla.

La verdad es que me tenía impresionado su forma de jugar. Además, no tenía ni idea de a qué juego estaba jugando. No me sonaba para nada y los pocos diálogos que tenía estaban en algo que creía que podía ser inglés...

-Ehhmmmhh... - dije con voz de intrigado - ¿te puedo preguntar una cosa?

-Bueno... "¿a qué juego?" - dijo girándose hacia mí sin dejar el mando ni un segundo. - Era eso ¿no?

-Pues... la verdad es... que sí. Está bastante interesante... pero no me suena de nada...

-Es normal - dijo pausando el juego - es una "demo" de un juego inglés que todavía no ha salido a la venta allí. La verdad es que tiene un nombre provisional que en inglés es una chorrada monumental... Esta es una de las cosas que me suele mandar mi padre desde Londres a veces... no sé ni dónde las consigue... Me llegó hace una semana.

-No está nada mal. Pero... ¿seguro que solo llevas una semana jugando?

-En realidad lo probé ayer...

-¡Buahhhh! Entonces es que eres una "crack" de los videojuegos. ¿Cómo puedes jugar así? - dije con cara de asombro.

-Jajajajaja - se rió - Es cuestión de práctica y de aburrimiento... supongo.

-Jajajaja... Sé de más de uno que, si supiera que juegas así a la consola, se "echaría un pique" contigo...

-¿Sí? - Preguntó entre risas y asombro - La verdad es que no lo creo... Les daría miedo perder contra "La Coletas"...

-Pues yo pagaría por ver como "te los cargas". Siempre se ríen de mí porque a mí se me dan muy mal. A ver como les sienta que les gane una "tía"... pero que les dé una paliza... jajajajaja.

-Jajajajaja... ¿tan malos son?

-No son malos... pero por lo que he visto... tú les ganarías.

-¡Ey! No soy tan buena...

-No sé... pero a mí me ganarías con una sola mano.

-¿Tan mal se te dan los videojuegos?

-¡Peor! ... Yo creo que en un par de años mis hermanos me ganarán...

-¡No!... Pero eso es porque tus hermanos juegan demasiado bien... hasta para su edad.

-¡Anda!... Ahora que lo pienso... seguro que tú les andas enseñando truquillos...

-Alguno sí que les enseñé...

-¡Vero!... ¡No les ayudes!... Que luego me dejan en ridículo...

-Jajajaja - se rió - ¿Y no sería mejor que los aprendieras tú?

-Sí, claro... Pero yo no tengo una canguro que me enseñe. Jajajajaja.

Entonces metió el brazo debajo del sofá y buscó dentro de una gran bolsa de plástico. Sacó otro mando y me lo pasó por encima de la mesa.

-No... En serio... soy muy malo jugando. No merece la pena...

-No creo que seas tan malo... Además, no tengo nada mejor que hacer hasta que llegue tu madre...

Estuvimos jugando algo más de hora y media... y concluimos en que sí se me daban bastante mal... y que a ella se le daban bastante mejor que a la media...

La noche había empezado fatal... pero nunca pensé que unas partidas a las tantas de la noche me animaran tanto...

Ahora la que seguramente estaría desanimada sería ella... y yo me sentía como si le debiese algo...

¿Y qué podía hacer yo?... No creo que quisiese ver a mucha gente después de la fiesta.

Estes últimos meses parecía más animada a cómo llegó... Era como si estuviese saliendo de un letargo amargo... Pero no sé si todo esto le haría volver a retraerse...

Outro día

Outro día

Inquedas mans rozan a superficie da pel,

movementos ondulantes acéndense na escuridade.

Berros,

ardentes sorrisos.

Máis berros,

soan latexos.

Luxuria rítmica,

beizos salgados,

cremosas apertas entre suspiros de emoción,

xigantesco iris nos teus verdes ollos.

E berro na penumbra resplandecente

convertida en transparentes agarimos.

E ledas bágoas humedecen a miña almofada

na susurrante alba dos meus soños.

Arrecendosa paixón que escorrega polas miñas costas.

Tranquilidade.

Repouso.

Calma.

Cómplices olladas.

Aloumiñanos o silencio

e as sabas da felicidade envólvennos

nas suas suxerentes enrugas.

E durmo no teu colo

onde a vacilante suor

pasará polas miñas meixelas.

Aparece unha pregunta no aire:

¿qué pasará mañá?

E unha resposta surxe:

Mañá será outro día.


brujilla(1998)


Bienvenid@!!

Bienvenid@ a mi rincón de escritura...

Aquí se irán subiendo algunas historias creadas por la brujilla del noroeste.

Las historias que te encontrarás no son reflejo de ninguna realidad vivida por la autora o sus conocidos pues ya existe http://labrujilladelnoroeste.blogspot.com para incluirlas junto con otras muchas cosas.

Se admiten comentarios sobre las historias y su desarrollo pero siempre manteniendo el espíritu de debate sobre las mismas y no sobre temas personales sobre la autora y los otros participantes o lectores del blog.